Que la Transicción española, de la dictadura franquista a la democracia, no era una tarea fácil, es cosa sabida por todos los que vivimos aquellos años con uso de razón, ó, al menos, por todos los que deseábamos un cambio profundo en el sistema político epañol. De lo que, la gran mayoría del pueblo, creo, no llegó a concienciarse fué de la forma en que se gestó, quiénes eran muchos de sus protagonistas,y los precios pagados durante su desarrollo.
A través de este interesante y documentado libro se puede comprobar la gran falacia que se nos ha hecho creer al pueblo llano español, e incluso, al de otros paises, en el sentido de que nuestra Transicción fue ejemplarmente modélica y pacífica, y, por tanto, poco menos que de obligada aplicación en aquellos paises que tengan que transitar hacia sistemas democráticos.
Para los que nos considerábamos minimamente "iniciados" en temas políticos, estaba claro que, una vez resuelta, con el asentimiento de los principales líderes de la oposición al viejo régimen, la disyuntiva entre ruptura y reforma, a favor de ésta última, el camino a recorrer iba a representar el continuismo temporal de muchos de los protagonistas y de sus métodos imperantes hasta entonces.
Sin embargo, nunca hubieramos podido creer hasta qué punto estaban dispuestos a llegar, o mejor dicho, hasta a lo que reálmente llegaron. Alfredo Grinaldos, pone nombres y apellidos a los artífices y ó consentidores (políticos, jueces, comisarios, etc.), algunos, aún, hoy, "personas de bien" en la altas esferas sociales, de los criminales sucesos acontecidos en la, todavía, reciente Transicción española.
De todas formas, como decía al principio, la tarea no era, ni mucho menos, fácil, y el autor de esta obra, documentándose en hechos ciertos y demostrables, obvia, no obstante, aquella importante circunstancia. Personalmente, quiero seguir creyendo en la figura de nuestro primer presidente, Adolfo Suárez. Al fín y al cabo, tuvo, entre otras, la dignidad de dimitir.
22.04.06
A través de este interesante y documentado libro se puede comprobar la gran falacia que se nos ha hecho creer al pueblo llano español, e incluso, al de otros paises, en el sentido de que nuestra Transicción fue ejemplarmente modélica y pacífica, y, por tanto, poco menos que de obligada aplicación en aquellos paises que tengan que transitar hacia sistemas democráticos.
Para los que nos considerábamos minimamente "iniciados" en temas políticos, estaba claro que, una vez resuelta, con el asentimiento de los principales líderes de la oposición al viejo régimen, la disyuntiva entre ruptura y reforma, a favor de ésta última, el camino a recorrer iba a representar el continuismo temporal de muchos de los protagonistas y de sus métodos imperantes hasta entonces.
Sin embargo, nunca hubieramos podido creer hasta qué punto estaban dispuestos a llegar, o mejor dicho, hasta a lo que reálmente llegaron. Alfredo Grinaldos, pone nombres y apellidos a los artífices y ó consentidores (políticos, jueces, comisarios, etc.), algunos, aún, hoy, "personas de bien" en la altas esferas sociales, de los criminales sucesos acontecidos en la, todavía, reciente Transicción española.
De todas formas, como decía al principio, la tarea no era, ni mucho menos, fácil, y el autor de esta obra, documentándose en hechos ciertos y demostrables, obvia, no obstante, aquella importante circunstancia. Personalmente, quiero seguir creyendo en la figura de nuestro primer presidente, Adolfo Suárez. Al fín y al cabo, tuvo, entre otras, la dignidad de dimitir.
22.04.06
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